Una vez más Coahuila volverá a ser considerada como tierra de dinosaurios, luego de que un grupo de investigadores localizaron en un ejido de Ramos Arizpe huesos de dinosaurio que, a juzgar por sus dimensiones, pudieran ser de un dinosaurio pico de pato.
- FOTOS: VANGUARDIA- CORTESÍA
Ramos Arizpe.- Luis García Moreno, fotógrafo miembro del grupo que realizó el hallazgo paleontológico, habló en exclusiva con VANGUARDIA sobre el descubrimiento.
“Un campesino le comentó a (el investigador) Régulo Zapata Jaime que en un cerro había unas piedras como huesos que no correspondían a todo lo que estaba ahí alrededor. En mayo, Régulo nos invita a Álvaro Jaime y a tu servidor, Luis García Moreno, yo como fotógrafo, a que vayamos para checar en ese sitio lo que comentaba el hombre del ranchito”, cuenta García Moreno.
Como si el azar jugara con los investigadores, un cambio de rumbo los llevó a los huesos.
“Se tomó la decisión de subir al lugar por otro rumbo, pero cuál fue nuestra sorpresa que antes de llegar al lugar que nos indicaron, nos encontramos con todos los huesos de un dinosaurio. Están todos los huesos completitos. Ese día estuvimos ahí checándolos, fotografiándolos.
“Hace poco, en agosto, volvimos a ir para escarbar y rescatar parte de lo que estaba ahí, subimos, ya con cámaras de video y se encontró más material. Régulo, con los conocimientos que tiene, escarbó con mucho cuidado. Me comenta que el 30 ó 40 por ciento de ese animal está en superficie y el otro está sepultado no a mucha profundidad. Sacaron varios huesos y se fueron acomodando e iban tomando ya forma”, cuenta el fotógrafo, que también ha registrado imágenes de pinturas rupestres.
“Tengo entendido que no han hablado con nadie, pero lo tienen que hacer y hablar con una autoridad en paleontología”, adelantó García Moreno.
“Deben compartir el hallazgo, darlo a conocer, es un descubrimiento muy importante para Coahuila y es de todos, se vuelve a confirmar que Coahuila es tierra de dinosaurios.
“Dicen que es un animal muy grande. Régulo le envió fotos a un amigo de Estados Unidos y le va a decir qué tipo de animal podría ser. Es un contacto que él tiene, un paleontólogo, aunque dos veces me ha comentado que podría ser un pico de pato”, finalizó.
“Un campesino le comentó a (el investigador) Régulo Zapata Jaime que en un cerro había unas piedras como huesos que no correspondían a todo lo que estaba ahí alrededor. En mayo, Régulo nos invita a Álvaro Jaime y a tu servidor, Luis García Moreno, yo como fotógrafo, a que vayamos para checar en ese sitio lo que comentaba el hombre del ranchito”, cuenta García Moreno.
Como si el azar jugara con los investigadores, un cambio de rumbo los llevó a los huesos.
“Se tomó la decisión de subir al lugar por otro rumbo, pero cuál fue nuestra sorpresa que antes de llegar al lugar que nos indicaron, nos encontramos con todos los huesos de un dinosaurio. Están todos los huesos completitos. Ese día estuvimos ahí checándolos, fotografiándolos.
“Tengo entendido que no han hablado con nadie, pero lo tienen que hacer y hablar con una autoridad en paleontología”, adelantó García Moreno.
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